Si la bibliografía de Kim Stanley Robinson ya era bastante impresionante con su saga sobre la colonización y terraformación de Marte (Marte Rojo, Marte Azul y Marte Verde), su nuevo libro, “Aurora”, no se queda atrás. Pero Aurora, a diferencia de Marte, no está en el Sistema Solar, sino en una estrella parecida al Sol, apasionante, misteriosa y muy cercana. Me refiero, claro está, a Tau Ceti:
“Dos mil ciento veintidós personas viven en una nave multigeneracional rumbo a Tau Ceti, a 11,9 años luz desde la Tierra. La nave se compone de…”
Tau Ceti es la estrella individual del tipo solar más cercana al Sol. Solo Alfa Centauri A está más cerca, pero forma parte de un sistema de tres estrellas. Tau Ceti es una estrella muy similar al Sol. Es solo un poco más pequeña con el 80% del radio solar.
Tau Ceti (derecha) es un poco más pequeña que el Sol (izquierda). También es más estable, en la imagen aparece sin manchas. (Fuente: Wikipedia)
Esta estrella, probablemente más antigua que el Sol, parece tener un lento periodo de rotación de 34 días, tan lento para una estrella de su tipo que no falta quien sugiera una situación inesperada: puede que la estrella la estemos viendo por su polo, y esto podría ser un problema si queremos estudiar sus planetas. Si estuvieramos viendo el sistema planetario por uno de sus polos, desde esta perspectiva un planeta no dejaría señal en la velocidad radial de la estrella. No lo veríamos.
La estrella está rodeada por un denso disco de escombros (debris disk) situado más o menos en la misma zona del cinturón de Kuiper del Sistema Solar. Aunque el disco de Tau Ceti parece ser más voluminoso que el del Sol, no llega al tamaño del de Epsilon Eridani.
“Tras superar el disco de escombros de Tau Ceti sin mayores problemas, llegaron a la zona planetaria…”
Tau Ceti es una estrella poco activa y muy estable. Tan estable es que muchos espectrógrafos suelen observar que las velocidades radiales apenan fluctúan con el tiempo, como si muy pocas fuentes de ruido alterasen sustancialmente la señal observada. Lo malo es que tampoco se detecta ninguna señal propia de un planeta.
“Los telescopios alojados en el bauprés de la nave eran extremadamente potentes, y ahora mientras cruzaban las órbitas planetarias de Tau Ceti, podían mirar a los planetas más de cerca.”
En 2012 saltaba la noticia. El finlandés Mikko Tuomi parecía haber descubierto una señal en la velocidad radial de la estrella que, al parecer, hasta entonces había pasado desapercibida. Simplemente había aplicado planteamientos estadísticos novedosos en los datos de velocidad radial conocidos. Y eran resultados espectaculares. Nada menos que cinco supertierras, con la cuarta de ellas (Tau Ceti e) en la Zona Habitable. Es verdad, la posible habitabilidad del planeta se deducía de un planteamiento optimista, ya que recibía bastante más luz que la Tierra…
Dada la novedad de su planteamiento (medias móviles para modelizar el ruido estelar) Tuomi fue muy prudente al anunciar sus planetas, y pidió la realización de más observaciones para confirmar el hallazgo.
No se han publicando artículos adicionales confirmando el descubrimiento, pero es habitual que se sigan obteniendo observaciones de la estrella en las que se no detecta nada. (Ver, por ejemplo, “Limits on Planetary Companions from Doppler Surveys of Nearby Stars”, Howard et al. noviembre 2014)
¡Qué lejos estamos aún de poder confirmar algo parecido a lo que imagina Kim Stanley Robinson en su libro!:
“Con mucho, la mayor parte de su tiempo de observación era ahora para la luna de[l planeta] E. Estaba cubierta de océanos en su mayor parte, con cuatro pequeños continentes o islas grandes, y muchos archipiélagos.”
2004. Se detecta un exceso en el infrarrojo compatible con la presencia de un disco de escombros.
2011.Un estudio de Pepe donde no se detecta señal alguna.
2012. Tuomi anuncia sus supertierras.
2014. El telescopio espacial Herschel resuelve el disco de escombros que rodea al sistema de Tau Ceti, mostrando que los planetas no se verían interferidos por el disco.
2014. Estudio general de Howard en el que los planetas de Tau Ceti no aparecen.
Kim Stanley Robinson es un autor de la llamada Ciencia Ficción “dura”. Para escribir su libro mantuvo diálogos con científicos que le detallaron lo entonces conocido sobre Tau Ceti. De esta manera, el sistema planetario descrito en el libro refleja fielmente los planetas detectados por Tuomi. Por supuesto, os recomiendo su lectura ¡aunque no olvidéis que los planetas de Tuomi están sin confirmar!.
1994. Un estudio de la estrella Tau Ceti en el que surgen sospechas sobre la posibilidad de que estemos observando la estrella desde el polo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario